martes, 10 de mayo de 2011
Malas.
Las chicas somos malas. No es que los chicos sean buenos ni muchísimo menos pero las chicas, entre nosotras, somos bastante peores.
Para empezar nos encanta mirar a la chica que tenemos al lado y enumerar sus defectos. Cualquier cosa nos vale: el color del pelo, su pechonalidad, sus ojos, el tamaño de su nariz, las piernas demasiado largas;o torcidas y un largo etcétera de cosas. Bien, la pregunta que haría cualquier ser racional sería ¿por qué coño os metéis en eso? La respuesta es sencilla: o nos aburrimos, o tenemos envidia, o nos cae mal o simplemente tenemos la necesidad de comentar el hecho de que se esa chica tenga un defecto que desde nuestro punto de vista nosotras no tenemos.
Centrándonos ahora en la envidia. Ésta es un mal más que común entre las mujeres. Nos da envidia el éxito de otras, su novio, su físico, su carisma o simple y llanamente su forma de ser. ¿Nuestra manera de reaccionar? Puede ser muy variopinta: podemos imitar a la otra chica; cosa que desgraciadamente no suele salir bien porque si La Madre Naturaleza hubiera querido hacer dos iguales habría hecho gemelas.También podemos fastidiar a la otra persona como si tuviéramos cinco años pero sin el "chinchareviña", dejarla de lado...y un sin fin de estupideces.
Las chicas somos malas y complicadas, tienen razón los hombres. Somos malas por influencia de otras chicas y complicadas por todo lo que vosotros sois capaces de complicarnos. Vosotros machitos,volvéis difícil algo tan simple como el sí y el no, como el me me gusta o sólo es un rollo. Éso es casi peor que todas nuestras maldades juntas.
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